Mensaje de Don Jacques CHIRAC, Presidente de la República francesa, en homenaje al Presidente chileno, Ricardo LAGOS, para la televisión chilena.

PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA


9 de marzo de 2006



Queridos amigos chilenos,

Al llegar al término del mandato de mi gran amigo, el Presidente Lagos, tengo el placer de poder rendirle un homenaje sincero y cordial.

Durante su presidencia, Chile ha dado al mundo un ejemplo de madurez y equilibrio al confirmar su pertenencia a las grandes naciones democráticas. Chile ha dejado atrás años difíciles, sin aceptar ni el olvido ni la impunidad, sino inspirándose en el espíritu de concordia. En la comunidad de naciones, es un ejemplo de espíritu de responsabilidad y valentía al servicio de la paz y el diálogo por el respeto del derecho y el multilateralismo.

Hemos anudado y mantenido un diálogo muy fructuoso con el Presidente Lagos a quien tuve el placer de recibir en París en dos ocasiones, en abril de 2001 y enero de 2004. Siempre he tenido en gran estima su visión y generosidad, que hacen de él un hombre de Estado cuya reflexión sobre el futuro de nuestro mundo estimula y alienta la acción.

Hemos abogado juntos por la protección de la diversidad cultural, de la que Latinoamérica ofrece una rica ilustración con sus pueblos, artes, tradiciones y culturas. Juntos igualmente, y acompañados por Brasil, presentamos hoy una propuesta de financiación innovadora del desarrollo, que interesa cada vez más a muchos Estados.

Cuando nos aproximamos al término del mandato de Ricardo Lagos, deseo decirle y decir al pueblo chileno que lamento ver marcharse a un interlocutor tan abierto, cordial y respetado. Pero también sé que esas relaciones, que iniciamos juntos, tendrán un nuevo capítulo con su sucesora, doña Michelle Bachelet.

Por último, espero sinceramente que el Presidente Lagos vuelva a menudo a Francia, donde siempre se le recibirá como se recibe a un verdadero amigo, con calor y corazón.